sábado, 16 de enero de 2010

De cabrón en cabrón y tiro porque me toca

En la entrada anterior hablábamos sobre la barbaridad de un sacerdote de Granada, que dijo que si la mujer aborta, el hombre podía abusar de ella. Pues bien, no es que le tengamos manía a la Iglesia ni nada, simplemente de que si ellos son gilipollas con mayúsculas nosotros no tenemos la culpa.
Ahora, otra cosa, digooo... persona con sotana ha querido soltar una perla para que todos lo comentemos. ¿Por qué? ¿No puede la Iglesia hablar todo el rato de Jesús y todo eso? ¡No! ¡Tienen que hablar de temas no relacionados para que se demuestre que ellos hablan de lo que le sale del forro de los cojones! Y si tuviera sentido, pues todavía...
Toca hablar de Haití, de un país que ya era pobre, y con la catástrofe de un terremoto de 7'3 en escala Richter, aún más, puesto las viviendas no están preparadas. Los muertos rondan los 100.000 y la cifra sigue creciendo cuanta más información conocemos. Muestro mi afecto y dolor por esos miles de muertos... pinchando aquí podéis mandar un donativo, en la que toda ayuda es poca. Pero, ¿qué pasará después? Esperemos que esto nos haga reaccionar para no olvidar las situaciones y condiciones límites en la que tienen que vivir millones de personas, en la que la mayoría de los niños se mueren a los 5 años y el resto no puede tener opción a una escuela, y las cosas básicas.

Cómo molesta la verdad en algunas ocasiones, ¿eh?



A lo que íbamos, una cosa... hay que ver, quiero decir "persona con sotana" y no me sale. De los creadores de "La homosexualidad es una enfermedad", "Retrasados Mentales" y "Cabeza con eco" llega...
"Existe males mayores que los que esos pobres de Haití están sufriendo estos días, como nuestra pobre situación espiritual, de la que deberíamos llorar".
Se ha ganado el título de cabrón de la semana por:
-Comparar decenas de miles de muertos con ser religioso o ateo.
-Inepto
-Mierdoso
-En resumen, un HIJO DE SU MADRE (pobre ella),... qué leñe... por HIJO DE PUTA.
Ah, y recuerdo, en nuestros ratos libres no quemamos iglesias, ni ganas, ni tiempo ni queremos... pe... ¡pero son tan cabroncetes que se les coge hasta cariño ya que no merece la pena hacerles ver la realidad (como por ejemplo, que hay cosas que se aprenden de la moral)!

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